Los Buenos, los Malos y las Feas Falacias Desarmistas
Por Gustavo Rubio
A esta altura del partido sabemos que los desarmistas mienten y que buscan imponer su punto de vista avasallando las libertades individuales y, deformando los mecanismos republicanos por medio del subjetivismo, el lobby turbio de la política de amigos, la desinformación y una actitud patoteril digna de lucir lindas camisas pardas o, más bien diría, una estrella roja atacan a la república misma escondidos detrás de un discurso políticamente correcto y ayudan a quienes están fuera de la ley.
Teniendo en cuenta esto, quisiera hablar sobre los hechos y falacias esgrimidos por estos sujetos antidemocráticos acerca de las armas de fuego de una manera que ellos, los desarmistas, puedan entenderlo..
Para empezar debemos recordar que las armas de fuego son objetos inanimados, carecen de voluntad. No son ni buenas ni malas, en cambio las personas si. Somos buenos o malos para resumir y, a partir de acá, estos conceptos se van a repetir hasta el hartazgo como para que los miembros de la RAD y allegados lo comprendan.
Como todos sabemos, hay una gran cantidad de personas en este planeta, algunos de ellos son buenos y algunos de ellos son malos. Simple. La vida es así y ha sido así desde siempre. Es la naturaleza humana. Ahora bien, en lo personal, creo que como especie tenemos muchas más personas buenas que malas y ese desbalance es el que mantiene a los malos bajo control la mayor parte del tiempo. Pero eso realmente funciona si hay muchos de los buenos alrededor y, de no existir esa exposición o cantidad visible, los buenos se convierten en víctimas.
A los malos les gusta agarrárselas con los buenos, uno a la vez cuando sea posible. Mano a mano sólo como último recurso y cuando es así, no lo hacen en una pelea justa. No les conviene. A su vez les gusta tener algo que les de una ventaja ya que no quieren que sus víctimas estén en igualdad de condiciones. Son cobardes en su mayoría. Los malos quieren tener algún tipo de ventaja física antes de elegir una víctima y una realidad acerca de las armas (de fuego o no) es que definitivamente dan una ventaja física, son herramientas multiplicadoras de fuerzas, ni más ni menos y es por eso que los malos no pueden conseguir el número eligen usar un arma para facilitarse esa ventaja.
Ahora bien, acá empezamos con el divague desarmista:
La primer falacia desarmista es “sin armas de fuego no hay delito”. Si este tipo malo no tiene una pistola o una escopeta o cualquier tipo de arma de fuego, él no podría tener una ventaja y por lo tanto, los buenos estarían a salvo de los malos…En fin… Todo lo que tenemos que hacer para saber que es una falacia grande como el curro que tienen los anti armas armado con charlas mentirosas es solo mirar el mundo que nos rodea. Los malos siempre encuentran una manera de tener una ventaja sobre sus víctimas ya sea con un cuchillo, un palo, alcohol, vehiculos o el número de integrantes del grupo. Siempre encuentran una manera. Muy a menudo la única ventaja que necesitan es sólo siendo más grande y más fuerte y es así que eligen a alguien que sea más pequeño y más débil que ellos.
Ahora bien, una cosa que los desarmistas se desviven por esconder es el hecho que las armas de fuego en manos de un buen tipo, de esa débil víctima, esa persona común y respetuosa de la ley, le da al mismo tiempo una ventaja sobre su atacante, su agresor. Por eso es que a las armas a menudo se las llaman “grandes igualadoras” Permiten que las personas más débiles sean capaces de defenderse contra las personas más fuertes que quisieran aprovecharse de ellos. Son la gran disuasión para los hechos de abuso, delito y crimen. Por algo el estado provee de una a cada funcionario policial ¿no?
Otra falacia que los anti-arma civiles venden es que “si tenés o portas un arma no te da más seguridad”. Dirán que el malo tendrá la ventaja de la ofensiva y al estar a la defensiva no dará una oportunidad cierta para defenderse, que emporará las cosas. El hecho es que sabemos estadísticamente que si los buenos pueden defenderse con armas de fuego logran detener las cosas para los malos armados que inicialmente tenían la ventaja. Si se hacen públicas las escondidas entrevistas carcelarias a delincuentes que utilizaron un arma de fuego en la comisión de un crimen se sabrá que lo último que quieren hacer es confrontar alguien más que esté armado. Como dijimos antes, a los malos no les gustan las peleas justas, así que si sospechan que alguien está armado lo harán pasar y esperarán a la siguiente víctima.
En el peor de los casos será un delincuente armado contra una víctima armada.
Según datos del FBI (nos tenemos que remitir a ellos por obvias razones varias) hay decenas de miles, incluso cientos de miles de casos cada año en yanquilandia donde “un buen chico con un arma” se defiende con éxito de “un mal tipo con un arma” aunque no salen en los medios masivos porque no es un escándalo ni rinde para el lobby desarmista con sus cámaras de “seguridad”, controles y registros pagos, etc.
Ahora otro escenario posible y poco hablado, uno bastante raro, pero que se va a empezar a ver cada vez más seguido por estas latitudes, es cuando una victima solitaria se encuentra abordada por múltiples malos. En esta situación una gran cantidad de personas anti-armas van a tratar de vender la mentira de que si hay múltiples atacantes (y encima desarmados) por un lado “las pistolas no harán ningún bien” “no se puede disparar a todos ellos” o “no se puede usar un arma de fuego para defenderse de atacantes desarmados”…
Bien, eso no es cierto.
Llegado el caso, se podría disparar a todos de estar obligado a hacerlo, pero por lo general no va ser posible porque, seamos sinceros, nadie quiere ser voluntario para ser el primero en recibir un disparo, ninguno de esos tipos malos va a decir “Me voy a comer los tiros para que todos puedan manotearle la billetera” Simplemente no tiene ningún sentido así que eso es una falacia. Decir que un arma no será útil contra un grupo de asaltantes es desconocer rotundamente del tema o, peor, mentir descaradamente para vender determinados puntos de una agenda turbia. Es una disuasión en primera instancia y una línea de protección para repeler el ataque en el otro extremo. Un recurso más antes que el estado venga en auxilio llegado el caso.
Es aquí en donde a los desarmistas les encantará decir “Bueno, sí, pero si esos malos también están armados entonces tu arma ahora es inútil porque hay más de ellos y también están bien armados” También es un error conceptual porque sobran los registros llenos de instancias donde una sola persona armada pudo con éxito defenderse contra múltiples atacantes armados (en causas de abigeato en los caminos solitarios de las provincias se han visto casos asi por ejemplo) Aquí, si bien entran otros factores a tener en cuenta, como el nivel de habilidad o el grado de compromiso con la defensa por ejemplo, la ayuda de una herramienta multiplicadora de fuerzas es fundamental.
Ya que hablemos de otra situación que muchos desarmistas locales aman usar para difundir mentiras sobre armas de fuego: cuando un loco armado en EEUU utiliza un arma para tener una gran ventaja sobre un gran grupo de personas y es capaz de acumular una gran cantidad de víctimas. Más allá de obviar categóricamente las cuestiones sociales, culturales, psicológicas, etc una vez más los anti armas en manos de civiles tratarán de imponer la falacia de que si las armas no existiesen no habría matanzas masivas porque los malos no podría tener esta gran ventaja. Lo descaradamente falso es que basta con mirar un poco alrededor del mundo, en cada pueblo, incluso en cualquier otro país, los malos, esos “locos” pueden matar a grandes grupos de personas sin armas de fuego. Todo el tiempo se ven noticias de bombas, camiones y autos atropellando peatones en lugares turísticos, incluso veneno para lograr su objetivo de eliminar a muchas personas.
De esta manera hay que rechazar la falacia de que las armas de fuego son la raíz de todo mal y que habría menos homicidios si no hubiese armas. Es hora de madurar y aceptar que a veces suceden cosas malas y que el Estado republicano no puede estar en todos lados sin convertirse en un estado tiránico y autoritario. Luego debemos pasar a aceptar el hecho de que la mejor forma en que podrían aumentar las probabilidades de las personas respetuosas de la ley, los buenos, de sobrevivir a un asalto armado o violento o tiroteo es si hay “un buen chico armado” en la multitud o en la intimidad del hogar. Ahora acá es donde los desarmistas también van a usar la falacia del “daño al bien común” y “del estado presente con más fuerzas de seguridad ” y que un civil armado “nunca detuvo un tiroteo”, que “escalará el grado de violencia de la situación” y animaladas varias. Bueno, eso no es cierto y tanto las ONGs desarmistas como los políticos a cargo de las decisiones lo saben. Sobran los ejemplos en dónde civiles legalmente armados han detenido tiroteos masivos, asaltos violentos y entraderas armadas. Habría que empezar a preguntarse por que se esconden estos hechos, que se quiere encubrir con tanto énfasis…
Siguiendo este lineamiento, y como para no quedar expuestos, los anti armas civiles enarbolan otra falacia: “el malo simplemente dispara primero o simplemente disparará para quitarle el arma” Bueno esto no es muy probable a menos que la portación sea a la vista (como sucede con los policías que sacan a la calle mal entrenados) o que los delincuentes tengan los datos de los registros oficiales (¿hubo robos con listado a domicilios de grandes legítimos usuarios durante la nefasta administración Gambaro en el exRenar?) Pero, incluso llegado el caso que el atacante disparara primero al civil que porta a la vista o al policía, se está obviando el caso que quizás haya más de una persona armada legalmente en la multitud que lo asista. Si más buenos, si más personas respetuosas de la ley legalmente y debidamente entrenadas pudieran ejercer su derecho a portar un arma de fuego este tipo malo no tendría ninguna posibilidad de actuar. Sería la mejor manera, la más eficiente y la más económica (bajaría a un tercio el gasto en seguridad en todos lo niveles) de evitar delitos, de hecho, en mi opinión, incluso haría mucho más para frenar el crimen violento si los malos tienen que aceptar el hecho de que vivimos en una sociedad donde los buenos puedan elegir ejercer legalmente su derecho a portar y defenderse hasta que el estado llegue en su ayuda.
De esta manera, si se dejaran de lado las falacias desarmistas y se optara por aceptar la realidad y actuar en consecuencia nos encontraríamos con que los malos tendrían que pensarlo dos veces antes de enfrentar a sus víctimas, deberían estar bastante seguros de que al menos algunas de esas personas llevan un arma y agregarle la incertidumbre de no saber cuáles están portando una herramienta defensiva. Por lo tanto van a pensar si es una situación en la que se tiene muy poca posibilidad de sobrevivir, agravar la situación en la que se encuentra agrediendo notoriamente a otro o no lograr el objetivo los malos empezarán a preguntarse hasta que punto vale la pena.
Cuando se evidencian las falacias anti armas civiles, cuando se deja de lidiar con la fantasía del curro desarmista y se pasa lidiar con los hechos y datos fríos y concretos se vuelve muy claro que la mejor manera de detener “un mal chico con una pistola (o varios)” en general no es realmente ni “más policías en las calles” ni “un buen tipo con una pistola” en realidad es “muchos buenos con pistolas” Una vez que todos acepten esta realidad y se pare de tratar de demonizar a las herramientas, a las armas de fuego, se corte con la mentira de decir que las personas se vuelven malas a causa de los instrumentos que usan, podremos finalmente pasar de perder el tiempo, la energía y los millones de pesos en vidas y recursos tratando de demonizar a las armas y comenzar a lidiar con la realidad social, con cuestiones políticas y económicas que hacen que los malos sean malos en primer lugar.
No pueden con cuatro cabecitas negras villeros que negocian fierros – chalecos y equipos con la policía – y se ponen a romper las bolas a los LU.
Esto viene desde hace 30 años.
El desarme punitivo de los LU es el inicio de un desastre civil.
Saludos
LikeLike